El Atlas le dio un golpe moral al América al vencerlos 2-1 en el Estadio Azteca, los alcanzó con 31 puntos y el gol del triunfo fue obra de Juan Carlos Medina.

Los tantos de la victoria fueron obra del brasileño Maikon Leite al minuto 32 y de Juan Carlos Medina al 69. Mientras que Oribe Peralta había descontado para los “azulcremas” al 40.

La “Furia Rojinegra” sabía que solo el triunfo le servía en ese objetivo de alcanzar un sitio a la Copa Libertadores y de paso pensar en el primer sitio de la tabla, por ello, la consigna fue de la jugarle de tú a tú a los capitalinos, que un poco más relajados sabían que el empate los ponía en lo más alto.

Por ello, fueron los visitantes los que tomaron la iniciativa, pisando más fuerte el área rival

Los rojinegros se fueron adelante en el marcador en un veloz contragolpe por derecha que el brasileño Maikon Leite definió pegado al poste que le correspondía cubrir a Moisés Muñoz.

Los de casa asimilaron bien ese golpe que significó verse abajo en el marcador, y aunque los tapatíos se asentaron mejor sobre la cancha, no pudieron solventar prácticamente la única llegada de gol que habían tenido en contra hasta ese momento.

Todo se originó en una salida de Muñoz por derecha para Luis Mendoza que sirvió para Oribe Peralta, quien con más fuerza que técnica logró regresarle al “Quick”, quien metió centro al área donde el ex jugador de Santos batió a Federico Vilar, al minuto 40.

Con el empate, el partido se abrió, ambos cuadros buscaron cerrar la fase regular con un triunfo. Las piezas se movieron desde la banca y tras un disparo de Oribe que buscó clarear al portero argentino Federico Vilar, la visita logró recuperar la ventaja.

En las afueras del Juan Carlos Medina tomó un balón y con todo el tiempo prendió un derechazo raso que se incrustó pegado al poste derecho, gol que festejó hasta su banca.

Otra vez abajo en el marcador, los de Coapa tuvieron que remar contracorriente y se fueron con todo al frente, y aunque metieron al rival en su portería no lograron el empate, para así cerrar con una derrota.