Luego de que el Congreso local respaldar las acciones del Poder Ejecutivo para recuperar el orden y la paz en Tamaulipas, la fracción priísta se solidarizó con los exgobernadores Tomás Yarrington y Eugenio Hernández Flores, uniéndose para votar en contra de reconocer el acuerdo que apenas la semana pasada el Gobierno de Tamaulipas firmó con siete agencias gubernamentales de los Estados Unidos, un hecho histórico que compromete a ambas fronteras a compartir información que contribuya al combate y la corrupción de organizaciones de la delincuencia.

Como se sabe, tanto Tomás Yarrington, quien fue extraditado de Italia, está preso en una cárcel de los Estados Unidos en donde enfrentará juicio por varios delitos cometidos durante su gestión como gobernador, como lavado de dinero y fraude bancario; y Eugenio Hernández Flores, quien se encuentra recluido en el penal actualmente a la espera de ser extraditado a la unión americana por ser requerido por la justicia norteamericana.

La “Campaña de Seguridad y Prosperidad” puesta en marcha entre el Gobierno del Estado y siete Agencias Federales estadounidenses, tiene como objetivo primordial combatir el tráfico de armas, la trata de personas, extorsión, secuestros, lavado de dinero, entre otros delitos que se comenten viéndose afectadas ambas fronteras .

Por lo tanto, resulta incomprensible que los diputados del PRI se hayan unido para votar en contra de la gestión realizada por el Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, cuando a todas luces es un logro extraordinario en esta lucha contra las bandas delictivas, no sólo a nivel estatal o nacional, sino a nivel internacional.

La colaboración que ahora existe entre el gobierno de Tamaulipas y autoridades de Estados Unidos permitirá ahora intercambio de información de más personas que podrían estar implicados en los casos de Tomas y Eugenio.