Un hombre originario de Matamoros, Tamaulipas, enfrenta un proceso de deportación por quinta ocasión en Estados Unidos, pero antes debe cumplir una condena de más de 11 años de cárcel por estar en ese país de forma ilegal y por posesión de 2 kilogramos de metanfetamina con la intención de distribuirla.

El martes 21 de noviembre el juez de distrito, Andrew Hanen, de Brownsville, Texas, agregó 12 meses a la sentencia de Juan Francisco López Hernández, de 44 años, por cometer los delitos más recientes mientras se encontraba en libertad condicional tras una condena previa por estar en Estados Unidos sin documentación que acreditara su estancia legal.

López Hernández se declaró culpable en agosto de 2016. Fue arrestado en abril de ese año después de que se alejó a toda velocidad, estrelló su vehículo e intentó huir luego de que la policía lo detuvo por una infracción de tránsito en Brownsville, indicaron los fiscales.

Tiene otras cuatro condenas emitidas en 2001, 2003, 2007 y 2011.