De cinco a diez años de prisión podrían obtener los padres de los menores que recurrentemente han sido observados en los principales cruceros de la localidad mendigando, esto según el Código Penal del Estado de Tamaulipas; en este sentido los adultos responsables ya han sido notificados hasta en dos ocasiones por el Sistema DIF Victoria y cuentan con denuncia ante la Agencia del Ministerio Público de Protección a la Familia.

Esto lo reveló la procuradora de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, Dulce María Macías Palominos, “estamos llevando a cabo el expediente de los niños del crucero que son muy reincidentes y se da el delito de corrupción de menores en cuanto a lo que es la mendicidad porque son reincidentes estas madres que los llevan a estos cruceros para que ellos pidan”.

La servidora pública recordó que existe un convenio con los padres de familia para no llevar a sus niños a los distintos cruceros de Ciudad Victoria a pedir dinero y les han ofrecido a estos cursos de belleza, repostería, y corte y confección, para que cuenten con un oficio que les permita trabajar, así como becas y programas como PANNARTI y Padrinos de Vida, sin embargo estos han rechazado esos ofrecimientos.

“Ellos quieren el dinero fácil, y entonces aquí quien está en peligro son sus niños porque si bien es cierto que no hay un campo laboral grande para ellos porque no tienen estudios de primaria, algunos de secundaria, pero no es que los niños puedan inducirlos a la práctica de mendicidad”, Macías Palominos recalcó que la tarde del jueves acudieron al crucero del 8 López Mateos en compañía de una unidad de la Policía Estatal y del DIF Tamaulipas para recoger a los menores pero las personas responsables de los estos se dieron a la fuga.

“Estamos pidiendo las medidas urgentes al Ministerio Público y llevarlos a Casa Hogar a estos niños para buscar otra familia, extensa de ellos no adopción, de ninguna manera queremos arrancarlos del entorno pero sí que se les dé otra vida”, son los artículos 192 y 193 del Código Penal los que prohíben la corrupción de los menores.