La actividad emprendedora en México avanzó el año pasado más de cuatro puntos porcentuales, en tanto que la mortalidad de empresas bajo un punto porcentual, reveló el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM).

El vicerrector asociado de Emprendimiento del ITESM, Daniel Moska, también destacó que en 2014, entre los emprendedores mexicanos bajó el porcentaje del miedo al fracaso y subió medio punto la intención de emprender, lo cual es importante para el desarrollo del país.

Así lo resaltó durante la presentación del estudio «The Global Entrepreneurship Monitor 2014 Global Report», en la parte sobre los resultados obtenido para México.

En México, subrayó, el estudio destaca que la actividad emprendedora en la fase inicial pasó de 14.8 por ciento a 19 por ciento, lo que representa un crecimiento de cuatro puntos porcentuales en un año.

Puntualizó que otro factor importante es que la tasa mortalidad de las empresas cayó un punto.

El especialista refirió que se conoce como actividad emprendedora en fase inicial a quienes se encuentran en el proceso de crear su empresa, o quienes han encabezado un negocio en un periodo menor a tres años y medio.

«Todo esto son buenas noticias, pero aún tenemos pendiente que todas estas empresas sobrevivan en el tiempo, generen empleos y puedan competir a nivel internacional», indicó.

Igualmente destacó que «entre los emprendedores mexicanos bajó el porcentaje del miedo al fracaso, subió medio punto la intención de emprender, pero por otro lado disminuyó la difusión del emprendimiento en los medios de comunicación».

Además, expresó, las nuevas empresas mexicanas 75 por ciento siguen muy enfocadas en el mercado nacional y continúan en una economía basada en la eficiencia cuando hay que migrar a una de innovación.

Moska consideró que «es importante que no se queden pequeñas, estas nuevas empresas tienen que nacer con un modelo de negocios global y una visión de crecimiento».

«Para esto toda la capacitación y entrenamiento será muy importante para que puedan escalar, tener tecnología innovación y el equipo directivo adecuado», agregó.

Por su parte, el presidente del ITESM, Salvador Alva, dijo que en el emprendimiento está la clave para tener una sociedad más desarrollada, por lo que las políticas públicas deben de apoyar a los emprendedores. Los países, apuntó, «requieren crecimiento para generar empleos y en el caso de México se requieren un millón de empleos anuales.

Mencionó que «en México cada año ingresan al mercado laboral 12 millones de jóvenes».

«Si el tres por ciento de estos muchachos pusieran alguna empresa generando cinco empleos cada uno, al final crearían 1.8 millones de empleos», estimó el directivo.