Dulce María Macías Palominos, titular de la Procuraduría de Atención a Niñas, Niños y Adolescentes, aseguró que las altas temperaturas, aunadas al estrés
laboral influyen para que se genere violencia entre las familias, la cual los principales afectados son los hijos.

“Los factores climatológicos sí afectan la conducta del ser humano, se presenta más violencia familiar”, explicó la funcionaria al informar que de acuerdo a estadísticas de la Procuraduría, en los meses de calor las denuncias aumentan de un 40 o hasta un 60 por ciento.

Esto debido a que las altas temperaturas disparan el estrés que producen las largas jornadas laborales y al llegar a la casa lo único que quieren es descansar, sin embargo se encuentran con problemáticas cotidianas de una familia.

Problemas que en otra época del año podrían pasar por alto o solucionarlos con facilidad, ahora son detonantes de violencia al juntar estrés, cansancio y calor.

“En estas conductas violencia regularmente quienes son los más afectados son los hijos, ya que el estrés del trabajo pueden descargarlos en ellos”.

“Llegan muy cansados y todavía llegar a luchar contra problemas familiares es muy cansado, pero no deben de olvidar que es su familia y ellos decidieron formarla, por lo que necesitan amor y protección”.

A cuatro meses del 2017, la Procuraduría de Atención a Niñas, Niños y Adolescentes atendió mil 647 casos de violencia y de las cuales 10% corresponden a violencia familiar e incluyendo física.

En contraste a esta situación en la época de invierno se presenta la situación contraria, al disminuir los casos y las mujeres que atienden, además de por el clima, porque es una época de celebraciones.