La tensión en la campaña de Donald Trump se dispara después de que un hombre intentara dispararle en medio de un mitin en Las Vegas.
Michael Steven Sandford, británico de 19 años, acudió a un acto de campaña del candidato republicano el pasado sábado. En medio del evento, Sandford se fijó en un agente que llevaba el arma con el seguro quitado. Intentó arrebatarle el revolver de la cadera poder encañonar al candidato con él. Fue detenido en ese mismo instante.
El joven, que asegura que lleva viviendo 18 meses en EEUU, sostiene que lleva un año contemplando la idea de matar a Trump pero nunca había reunido el valor suficiente. El día de antes del mitin, acudió a un club de tiro a practicar con una Glock de 9 milímetros para darse confianza.
Había comprado una entrada para el acto de Las Vegas y otra para el siguiente en Phoenix por si su plan salía mal. Después de haber barajado varias opciones, decidió que era mucho más fácil hacerse con un arma en medio del mitin que pasar una por los registros de seguridad.
También se había hecho a la idea de que solo le daría tiempo a disparar un par de veces antes de ser abatido por los cuerpos de seguridad.Después de ser detenido, el joven ha asegurado que no se arrepiente de nada.»Si estuviera en la calle mañana, volvería a intentarlo», confesó a la policía.
Esta no es la primera vez que el candidato sufre intentos de agresiones en medio de actos de campaña. La polémica de sus discursos agresivos ha hecho que en más de una ocasión, los mítines acaben con detenidos.
La violencia en los actos ha llegado a tal nivel que el candidato ha tenido que ponerse en las manos de la protección del Servicio Secreto, el mismo cuerpo que protege a Barack Obama.
Por el momento, la única amenaza de muerte conocida hasta el momento ha sido la de Sandford. Bajo el cargo de comportarse de forma violenta en un área restringida, el joven ha sido enviado a prisión sin fianza. La vista de su caso está prevista para el 5 de julio.