El 1 de enero de este año el reportero maya Edwin Canché Pech sufrió una golpiza por parte de 5 policías y el presidente municipal de Seyé, Yucatán después de ir a cubrir un choque que involucraba al sobrino del último.
El fuero no permite judicializar al edil que ya le había mandado agredir anteriormente. Un alcalde que golpea a un periodista con sus propias manos y se acoge al fuero para quedar impune.
Cinco policías que lo torturan y la libran con una fianza de alrededor de 8 mil pesos cada uno.
Un estado donde las agresiones a la prensa vienen de los funcionarios.
Esta es la historia de Edwin Canché Pech, corresponsal del Diario de Yucatán en Seyé, un municipio indígena a 36 kilómetros de la capital del estado, Mérida.