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Llenan misas en San José; querían ver al padre secuestrado
3 abril 2017

“Todos estábamos esperando una retroalimentación sobre la situación del padre Oscar, por eso llegó mucha gente a las misas este domingo, pero aún no podrá estar con nosotros, pues le han dado un descanso y tendrá un tiempo fuera de la feligresía por todo lo que ocurrió”.

Así lo expuso Miguel Maldonado, un laico cercano a la administración del templo, quien menciona que fue el padre adjunto en San José, quien estará celebrando los oficios a partir de este fecha, hasta que se comunique algo por parte de la diócesis sobre si volverá a contar con el padre López Navarro.

 Fue con una oración por las personas que se encuentran atravesando una situación difícil de inseguridad y en agradecimiento por la liberación del padre Oscar, que inició la misa en el templo de San José, al mediodía de este domingo, acudiendo un número importante de feligreses al oficio que celebró un padre distinto a quien por varios años dijo la liturgia en esta casa de Dios.

“Las misas se continuarán llevando de manera normal en la iglesia y muchos acudimos para ver si nos daban alguna información sobre el padre Oscar, y solamente se nos anunció que él (el sacerdote Oscar López Navarro) va estar en una especie de retiro durante un tiempo sin oficiar”, expuso.

El templo de San José, ubicado en la colonia Miramar, al sur de Altamira, saltó a los medios nacionales e internacionales el miércoles 29 de marzo, al correr la noticia, primero en redes sociales y después en las empresas de información sobre el secuestro del sacerdote que oficiaba en este templo, Oscar López Navarro, de 40 años de edad y originario del estado de Jalisco y perteneciente a la orden “Cristo Mediador”.

Como ya se dio a conocer el padre fue liberado por sus captores en una zona sin especificar de Altamira, el jueves 30 de marzo, durante el transcurso de la mañana, informando la diócesis de Tampico que se encuentra “sano y salvo”, sin mencionar si está aún en el estado o volvió a su lugar de origen.

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