Cuautepec, Hidalgo.- 43 años y nueve meses de prisión, es la sentencia que el día de ayer un Juez dictó en contra de Norberto Gayosso Vázquez, de 58 años de edad, acusado del delito de feminicidio en agravio de su propia nieta, una adolescente de 16 años de edad.
El crimen por el que fue sentenciado ocurrió el 25 de febrero de 2016. Ese día, la víctima, identificada como Frida Sherlin García Gayosso, de 16 años de edad, salió de su domicilio ubicado en la colonia Juárez, con rumbo a su escuela, pero ya no regresó.

Ese mismo día, alrededor de las 21:45 horas, los padres de la joven acudieron a la comandancia de la dirección de Seguridad Pública de Cuautepec a reportar la desaparición.
Durante la entrevista con las autoridades, el padre de la menor relató que semanas atrás habían sostenido una fuerte discusión con el abuelo materno de la menor debido a la disputa de propiedades y por su alcoholismo, lo cual propició que lo corrieran.

Supuestamente, molesto porque lo echaron de la casa, el abuelo les advirtió que se iban a arrepentir toda su vida y que les “pegaría donde más les doliera”.

Ante tal versión, los oficiales pidieron al afligido padre que los llevara al domicilio donde actualmente habitaba el padre de la madre de la adolescente.

Los elementos llegaron a la vivienda marcada con el número siete de la calle Enrique Cruz, en la comunidad de Santa María Nativitas, donde solicitaron al arrendatario las llaves para ingresar.

Fue en una de las habitaciones donde descubrieron el cuerpo sin vida de la jovencita sobre la cama, tapado con dos cobijas. La menor aun portaba el uniforme escolar, no tenía ropa interior, además de que presentaba sangre en la boca y la blusa.
Vecinos relataron que vieron salir a Gayosso Vázquez a bordo de un vehículo Dodge Dinasty blanco, modelo 90, por lo que el personal de la Policía Ministerial montó un operativo para su localización y el domingo 28 de febrero finalmente fue detenido y vinculado a proceso por el delito de feminicidio en agravio de su nieta.

A casi 15 meses de ocurrir el crimen, el abuelo asesino fue hallado culpable y recibió dicha sentencia condenatoria, además, la autoridad judicial le impuso una sanción económica por reparación de daño de 365 mil pesos.

“Nada es justo, en cierta forma estando en prisión mi padre va a pagar lo que hizo con mi hija… 43 años de sentencia está bien porque sabemos la edad que tiene, pero nada nos reparará el daño que cometió en nuestra familia”, indicó la madre de la víctima.